Camila es una escort risueña con quien compartir momentos muy intensos de lascivia y erotismo. Imagina un cuerpo de medidas perfectas, dibujado con espectaculares curvas. En la amedrentad, es una amante sensual y apasionada que te va a dejar sin aliento. Tira de un pequeño mechón de vello púbico de tu pareja (si lo tiene) con la yema de los dedos. Hazlo cuidadosamente y preguntando a tu pareja como desea que lo haga. Este pequeño tirón envía pequeñas cargas eléctricas desde el monte de Venus al cuerpo entero. Esto, para la mayor parte de las mujeres, es muy estimulante. Esperar a que nos quieran es una de las experiencias más humillantes que puede existir. Suplicar amor es definitivamente vergonzoso y sin embargo hay mujeres que se niegan a vivir de otro modo. Hay que recordar que nuestra dignidad es lo que está en juego porque no te merece quien te de dádivas en el amor
Lamió mi cuello y lo pellizcó con tus dientes, con mordeduras pequeñas y suaves. Esos cambios de intensidad, su saber hacer en todos y cada instante lo que debía y el darme lo que necesitaba, me hacía sentir expectante y sobre todo, muy excitada. Me abrió la camisa, sin desabrochar ni un botón dejando mis pechos desnudos… La playa: ¿inmersión flaca y sexo? ¡Sí por favor! Puede que se esté preguntando sobre la arena y de de qué manera llegar a lugares incómodos. Deja de preocuparte por eso! Simplemente diríjase hacia las gradas del salvavidas y disfrute de no poner arena en su traje. Cuando empezamos una relación, las 2 s se esfuerzan por mostrar la más atrayente de sí, mas a medida que avanza la relación y la pareja se marcha conociendo con más profundidad, el verdadero yo de cada uno de ellos empieza a emerger.
Bostezar durante el coito es mortal y estornudar impide la fecundación, conforme Plinio
Para las mujeres, el ser selectivas es la mejor manera en que la naturaleza les ayuda a lograr la relación correcta, en el momento adecuado, y con el hombre adecuado. Así que hay que ponerse duras. Has de estar presta a decir que no a los hombres que no dan la talla, y tienen que estar prestas a hacer esto DESDE EL PRINCIPIO y RÁPIDAMENTE en la etapa de las citas. Siéntete libre de salir todo cuanto quieras, ya que NO debes estar demasiado apegada, no debes estar físicamente implicada en la amedrentad y no tienes que proseguir adelante con cualquiera que no quiera lo que quieres. No obstante, algunas mujeres piensan que ser de esta manera las hace demasiado maliciosas. Por alguna se las ven muy duras al ser plenamente sinceras sobre donde están y de qué manera ven el comportamiento de otra persona. Es totalmente normal sentirse de esta manera. Del resto de factores del cortejo solo podemos decirte que apliques lo que suele aconsejarse en todo tipo de cortejo: naturalidad, sonrisa, capacidad de percibir, buena presencia, cuidado anatómico, afabilidad, educación… Nada que no pueda valer para cualquier género de mujer. El sí o bien el no dependerá de la belleza o bien no de la mujer. Dependerá de otros factores. En cualquier caso, si alguien tiene que decir no ha de ser ella, la bella. No te lo digas tú por adelantado. Y si el no, finalmente, llega, consuélate pensando en el viejo refrán que asegura que la suerte de la fea la rica la desea. Tras todo, el placer (por suerte) no es un bien de exclusivo empleo para todas y cada una aquellas y aquellos cuyo físico que ajusta al canon de lo que consideramos precioso. Y tampoco el amor. Uno y otro están ahí, aguardándote. Sal a procurarlos y no temas por las consecuencias de su busca.
La estrella. ¿Quieres un nombre? Elige a cualquier galán de cine. Este género de seductor es glamuroso, atrayente, muy diferente a todos nosotros. Su vida, al menos, tiene muy poco que ver con la nuestra. Gracias a él podrás ir donde nunca fuiste ya antes y donde muy probablemente jamás podrías entrar si no fueras con él., Si un don cariñoso es mutuo y exclusivo, este da pie a una relación sana de pareja en la que se puede dar continuidad y duración al proceso y que es capaz de acoger de una forma prudente, racional y responsable a una prole que requiere siempre de los mayores cuidados y atenciones. Conforme a lo anterior, es recomendable para aquellas personas con una baja en el deseo sexual ahondar en su propia sexualidad, en tanto que al desarrollar estos espacios propios podemos conocer de forma libre lo que nos agrada y nos estimula, y al unísono, nos responsabilizamos de nosotros mismos, ya que no necesitamos de otra persona para sentir esas emociones, solos nos podemos estimular.
Pon en práctica todo lo que hemos comentado, cambia la actitud: es un arma muy letal
Se nos ha dicho a todos, o hemos llegado de alguna forma a la conclusión, que nuestro cuerpo no está bien. Esta o bien aquella se cae, es demasiado pequeña, demasiado fláccida, demasiado pecosa, y la lista prosigue y sigue. Estos mensajes negativos permanecen con nosotros (por norma general a lo largo de mucho tiempo, ¡si no por siempre!) Y pueden traducirse en que no deseamos ser tocados allá e inclusive pueden reducir nuestras sensaciones. Los cuerpos del envejecimiento desafían nuestra gracia y aceptación de nosotros mismos. ¿Podemos aprender a ver el peso agregado, las arrugas y la caída del pelo no como imperfecciones sino más bien como medidas de experiencia y sabiduría?
Esta Rebeca tiene un poder y una fuerza asombrosos sobre su víctima. Allí donde hubo otra mujer quedan los pliegues que dejó su cuerpo entre las sábanas, queda su aliento y quedan sus olores. Se puede tropezar con su cepillo de dientes olvidado en el cuarto de baño, o bien con una nota de su puño y letra que diga algo tan insignificante y tan personal como: Cariño, no te olvides de llevar esta ropa a la lavandería. Desde su ausencia, esa Rebeca en pasado parece justificar la curiosidad y el interés que lúcida. Como fue primero (como la madre), ella personifica la medida de lo que significa ser una mujer. ¿Me quieres más que a ella?, ¿Eres más feliz conmigo que con ella?, ¿Cuál de las 2 te agrada más?… son el tipo de oraciones que despierta con más frecuencia la Rebeca en pasado.
Entré en la tienda en búsqueda de un elixir poderoso. Y repugnantemente costoso. Cuanto más costoso, mejor. Lo más importante: tendría que eliminar la degradación y la madurez de mi cara. En una tarde. Fui hacia la estantería imposible. Imposiblemente cara. Me atendió una niña de ojos tristes que, según me procuraba persuadir, tenía 45 años, y me explicó, con todo tipo de detalle, de qué forma estresan a los caracoles para que produzcan la baba prodigiosa. Si me embarraba de las babas estresadas, tendría exactamente el mismo aspecto que esa joven de 45.
Sabrina es una morenaza muy caliente
En cuanto a tu propio ritmo, imagina que comes una exquisita y carísima comida de 7 platos preparada por un chef de primera.¿La tragarías tan deprisa como pudieras? No, por suerte harías lo que todos los sibaritas hacen: comerías de forma lenta, saboreando cada mordisco y haciendo tiempo a fin de que baje la comida antes de continuar con el próximo plato. Mas también es importante no poner demasiado énfasis en su éxito o fracaso en esta conquista. He pasado por períodos en los que no tuve relaciones sexuales, y por cualquier razón, dejé que afectase mi autoestima y mi sentido de autoestima. Para comenzar, ajustar el temporizador durante 5 minutos y siéntate enfrente de tu compañero, con las piernas cruzadas y con las rodillas de uno y otro tocándose (con o bien sin ropa), o bien con la mujer sentada en el regazo del hombre. Centra ahora en el ojo izquierdo de tu pareja una mirada lenta y cariñosa, una mirada que sea consciente de todo el cosmos que se abre tras ese ojo. Observa la respiración de tu pareja. Deberéis sincronizar las 2 respiraciones, buscar el mismo ritmo mientras seguís mirándoos de una manera suave y llena de reconocimiento.
Acá te ofrecemos múltiples de esas fotografías para que eches a volar tu imaginación y, dejándote llevar por tu capacidad de fabulación erótica, seas capas de concebir la historia que dé sentido a todas y cada una estas sugerentes imágenes que llevan el sello de la elegancia y el savoir faire de ese fantástico fotógrafo que es Andrew Lucas. Los médicos y enfermeras tradicionales usan uniformes blancos, a menos que estén en batas de cirujano. Es posible que tengan estetoscopios, guantes, depresores de lengua, gafas, un portapapeles o bien varias herramientas de examen sexual, como espejo y lubrificante. Un tapón trasero puede pasar de forma fácil como su termómetro rectal. Los médicos y enfermeras examinan a los pacientes, toman notas, hacen preguntas tanto apropiadas como inapropiadas, evalúan la respuesta sexual, dan baños de esponja y toman muestras de tejidos y fluidos anatómicos. ¿Te agradan las mujeres de piel bronceada, pelo negro, tacto sin engaños y sonrisa deslumbrante? Yo soy una de esas mujeres. La sonrisa es en mí la el anticipo de toda la dulzura que soy capaz de obsequiar a los hombres que tienen la suerte de transformarse en mis amantes. Si quieres degustar esa dulzura solo debes llamarme. Voy a estar encantada de transformarme en el mejor manjar para tus labios. Saboréame y, tras haberme probado, intenta olvidarme. Te resultará imposible. Habrás quedado encantado por mi simpatía y, evidentemente, por todo el erotismo que puedo despilfarrar en mis encuentros más íntimos.
GEORGES BATAILLE EL EROTISMO
Santo el blog y de mis amores ¿por donde comienzo este de sargeo? No lo sé, ¿se pueden resumir unas 5 horas de sargeo en unas líneas? Imposible, pero incluso de este modo intentaré sacar lo mejor del escritor que llevo dentro para contaros lo que creo que fue mas interesante y que os podría aportar algo. Puede representar una perturbación hormonal cuando se observan ciertas modificaciones; por ejemplo, en la cara, la patilla que se prolonga como si fuera una barba naciente, o la presencia de un halo oscuro sobre el labio superior, que se ve como un bigote. Estas señales ameritan ser estudiadas. De igual manera, un vello grueso, negro, fuerte y ensortijado en las piernas, que al rasurarlo hasta punza como espinas y recuerda más bien el vello masculino, suele ser otro indicio de un inconveniente hormonal.
Tal vez te has dado cuenta de que antes he utilizado la expresión educar a la pareja. Eso en muchas ocasiones es lo que el rol de Perseguidor semeja que pretenda hacer con su pareja, como si se tratara de un padre que riñe a su hijo. Solo que acá son dos adultos y la conversación saliente puede parecer realmente absurda. Y, sin embargo, sucede. De ahí que, a la pregunta: Cuando discutís, las oraciones que más repites (o similares) son…, puedes haber escogido de forma perfecta la opción: Qué voy a hacer contigo, No hay manera de que aprendas, La has vuelto a pifiar. A eso me refería. ¡Ni que tu pareja fuera una criatura a tu cargo! Esa es una de ti que produce ambivalencia en tu pareja. Por una parte, la cuidas, la mimas, la ayudas a tomar decisiones… Esa mano derecha que la sustenta sin duda le chifla. Pero te pasas, no sabes poner límites y entonces ya no la ayudas sino que la diriges. Y eso se aprecia todavía más en los momentos de frustración, donde de forma directa le riñes. He conocido parejas que se charlan como si se tratara de un padre a su hijo adolescente. ¿Con esas pintas sales de casa?. ¡Ni que fuera al instituto! A veces las dejas caer sin venir a cuento, solo por el hecho de que ya vas con el radar puesto de a ver qué pillo que no esté bien, como el profe que se mira las libretas del pupilo en busca de alguna falta que corregir.